Cardiopatías congénitas: entender el
corazón desde el nacimiento
Las cardiopatías congénitas son alteraciones del corazón presentes desde el nacimiento. Estas pueden variar desde defectos leves que no generan síntomas hasta problemas más complejos que requieren tratamiento médico o quirúrgico especializado.
Gracias a los avances en la cardiología infantil y adulta, hoy en día muchas personas con cardiopatía congénita pueden llevar una vida plena con un adecuado seguimiento.
Defecto del tabique auricular (CIA).
Defecto del tabique ventricular (CIV).
Persistencia del conducto arterioso.
Tetralogía de Fallot.
Transposición de grandes arterias.
Estenosis valvulares congénitas.
Dificultad para respirar o cansancio fácil.
Labios y uñas azulados (cianosis).
Soplos cardíacos detectados en la infancia.
Crecimiento lento en niños.
Hinchazón en extremidades.
Alteraciones genéticas o cromosómicas.
Factores ambientales durante el embarazo.
Enfermedades maternas como diabetes o infecciones.
Exposición a fármacos, alcohol o tabaco en la gestación.
Ecocardiograma fetal y neonatal.
Electrocardiograma (ECG).
Resonancia magnética cardíaca.
Cateterismo cardíaco en casos complejos.
Evaluación clínica y antecedentes familiares.
Controles prenatales regulares durante el embarazo.
Hábitos de vida saludables de la madre.
Detección temprana en recién nacidos.
Vacunación y prevención de infecciones en niños con cardiopatías.
Seguimiento periódico con un cardiólogo especializado en cardiopatías congénitas.
Control del desarrollo y crecimiento infantil.
Limitaciones en la actividad física solo en casos graves.
Apoyo psicológico y acompañamiento familiar.
Medicamentos para controlar síntomas o prevenir complicaciones.
Cirugías cardíacas correctivas o paliativas.
Cateterismos intervencionistas como alternativa mínimamente invasiva.
Tratamientos personalizados según el tipo y gravedad de la cardiopatía.

Cardiopatías congénitas: entender el corazón desde el nacimiento
Las cardiopatías congénitas son alteraciones del corazón presentes desde el nacimiento. Estas pueden variar desde defectos leves que no generan síntomas hasta problemas más complejos que requieren tratamiento médico o quirúrgico especializado.
Gracias a los avances en la cardiología infantil y adulta, hoy en día muchas personas con cardiopatía congénita pueden llevar una vida plena con un adecuado seguimiento.

Defecto del tabique auricular (CIA).
Defecto del tabique ventricular (CIV).
Persistencia del conducto arterioso.
Tetralogía de Fallot.
Transposición de grandes arterias.
Estenosis valvulares congénitas.
Dificultad para respirar o cansancio fácil.
Labios y uñas azulados (cianosis).
Soplos cardíacos detectados en la infancia.
Crecimiento lento en niños.
Hinchazón en extremidades.
Alteraciones genéticas o cromosómicas.
Factores ambientales durante el embarazo.
Enfermedades maternas como diabetes o infecciones.
Exposición a fármacos, alcohol o tabaco en la gestación.
Ecocardiograma fetal y neonatal.
Electrocardiograma (ECG).
Resonancia magnética cardíaca.
Cateterismo cardíaco en casos complejos.
Evaluación clínica y antecedentes familiares.
Controles prenatales regulares durante el embarazo.
Hábitos de vida saludables de la madre.
Detección temprana en recién nacidos.
Vacunación y prevención de infecciones en niños con cardiopatías.
Seguimiento periódico con un cardiólogo especializado en cardiopatías congénitas.
Control del desarrollo y crecimiento infantil.
Limitaciones en la actividad física solo en casos graves.
Apoyo psicológico y acompañamiento familiar.
Medicamentos para controlar síntomas o prevenir complicaciones.
Cirugías cardíacas correctivas o paliativas.
Cateterismos intervencionistas como alternativa mínimamente invasiva.
Tratamientos personalizados según el tipo y gravedad de la cardiopatía.